La esofagitis es la inflamación e irritación del esófago. El esófago es el conducto que transporta los alimentos de la boca al estómago.
Es por este motivo que es importante cuidar la alimentación y tener unos hábitos saludables para mitigar los problemas que los mismos pueden generar en el esófago. En Nutrición Bilbao somos especialistas en enfermedades inflamatorias y acompañamos a nuestros pacientes en todo el proceso, tanto a nivel nutricional como emocional para ayudarles a mejorar tanto en su sintomatología como en su enfermedad.
Pero vayamos por partes y expliquemos los tipos de esofagitis más comunes que tenemos.
Diferentes tipos de esofagitis
La esofagitis puede tener causas variadas, por tanto, hay que identificar los motivos de la misma para de esa manera pautar el tratamiento más adecuado para el paciente. Podemos destacar 3 tipos de esofagitis principales.
Esofagitis por reflujo gastroesofágico (ERGE)
En este caso la esofagitis se debe a un problema funcional de la válvula que controla el paso de contenido del esófago hacia el estómago. Si esta válvula, llamada esfínter esofágico, se relaja de forma inadecuada puede permitir que el contenido ingerido junto con los jugos y enzimas gástricas vuelvan a pasar al esófago, irritando así, la mucosa. Es lo que llamamos reflujo gastroesofágico.

La enfermedad por reflujo gastroesofágico es una afección en la que esta regurgitación de ácido es un problema frecuente o continuo. Una complicación de la enfermedad por reflujo gastroesofágico es la inflamación continua y daño de tejido en el esófago.
Esofagitis eosinofílica
En estos casos la esofagitis se produce normalmente por una reacción alérgica y se denomina así porque el esófago está colonizado por eosinófilos que son glóbulos blancos que aparecen como respuesta a un agente que ha causado la alergia y que en condiciones normales no deberían estar allí
Los alimentos que desencadenan este tipo de esofagitis por alergia pueden ser la leche, los huevos, el trigo, la soja, los cacahuates y los mariscos.
Normalmente los pacientes con esofagitis eosinofílica suelen tener otras patologías como dermatitis atópica, ser asmáticos o tener otras alergias no relacionadas con la comida como pueden ser al polen.
Esta inflamación puede darse tanto en la población infantil como en la adulta y aunque no es contagiosa, si puede tener un componente hereditario y por ello tener varios casos en diferentes miembros de la familia.
Esofagitis inducida por medicamentos.
El consumo de algunos medicamentos como la aspirina, ibuprofeno, antibióticos, …, pueden dañar el tejido esofágico si entran en contacto con él de forma recurrente o si se han ingerido con poca agua.
También pueden darse otras circunstancias que generen esofagitis como pueden ser cirugías, la existencia de una hernia de hiato, los vómitos persistentes o por ejemplo tratamientos oncológicos que pueden originar o acentuar el malestar.
En función de la causa y daños que haya originado la esofagitis el tratamiento será uno u otro. Es importante abordar la enfermedad cuanto antes porque si no se se puede derivar en complicaciones como estrechamiento del esófago, problemas al tragar, pérdida de peso involuntaria, deshidratación y en los casos de años de reflujo gastroesofágico sin tratamiento se puede presentar una afección llamada esófago de Barrett que podría derivar a cáncer del esófago.
Síntomas de la esofagitis
Los síntomas más frecuentes que padecen los pacientes con esofagitis son:
- Acidez de estómago y regurgitación
- Afonía o ronquera
- Dolor de garganta
- Dificultad para tragar, llegando en los casos más graves a quedarse los alimentos atascados en el esófago (impactación alimentaria)
- Dolor de pecho
- Tos
- Asma o dificultad respiratoria
- Dolor en el pecho

Causas de la esofagitis
Ya hemos visto que en el caso de una esofagitis eosinófila la causa suele ser alérgica por lo que será necesario pautar un plan nutricional cuidadoso que elimine aquellos alimentos alergénicos que desencadenan la sintomatología.
En el caso de la esofagitis por la ingesta de medicamentos será necesario pautar otra medicación que ayude al paciente sin afectar al esófago o asegurar que la ingesta de los mismos se hace con suficiente líquido para que los arrastre directamente al estómago y no se quede ningún resto de los mismos en el esófago.
. Sin embargo, en la gastritis por reflujo gastroesofágico las causas más comunes son:
- Alcohol
- Tabaco
- Ingesta de alimentos irritantes como el chocolate, café, especias, comidas con alto contenido en grasa, …
- Sobrepeso, obesidad o embarazo.
- Vómitos
- Acostarse tras comer mucho sin haber hecho la digestión.
- Presencia de hernia de hiato
Por qué es importante cuidar la alimentación en la esofagitis.
Está comprobado que una correcta alimentación mejora los síntomas y la evolución de la enfermedad del paciente que sufre esofagitis por ello es muy importante pautar una dieta personalizada que mejore rápidamente el pronóstico. El plan nutricional puede ir acompañado de medicación para inhibir los ácidos del estómago y de corticoides tópicos por su acción antiinflamatoria.
En Nutrición Bilbao lo que buscamos a través de la alimentación y hábitos saludables es disminuir la acidez y las secreciones gástricas del estómago, por lo que hay que seleccionar alimentos que suavicen la mucosa y calmen la irritación y el dolor.

- Por ello, el paciente debe incorporar una dieta variada y equilibrada, con alto contenido en fruta, verdura y fibra vegetal de cereales y legumbres.
- Aumentar la ingesta de ácidos omega 3 y 6 por su acción antiinflamatoria.
- Hacer 5 comidas en lugar de 3 para evitar atracones y picar entre horas.
- Comer lentamente y masticar bien los alimentos.
- Evitar alimentos irritantes como el café (aunque sea descafeinado), especias, picantes, bebidas con gas, cítricos, tomate, menta, chocolate, tabaco y alcohol.
- Reducir la ingesta de producto lácteos como la leche o el queso y los embutidos.
- Cocinar al vapor, al horno o al microhondas y evitar todo lo que se puede los fritos y los alimentos a la plancha.
- Evitar alimentos con temperaturas extremas, ya sean muy calientes o muy frías.
- Evita las comidas y las bebidas que favorecen la relajación del EEI como las grasas (especialmente fritos), pimienta y especias, chocolate, alcohol, bebidas con gas, café, frutos cítricos, tomate y productos mentolados.
- Comer dos o tres horas antes
- Perder peso
- Medidas de control de estrés
En los caso de reflujo gastroesofágico eosinófilo el plan nutricional va dirigido a eliminar de la dieta aquellos alimentos alergénicos para el paciente (leche, huevos, …) y es esencial llevar a cabo un seguimiento estricto de la persona porque en ocasiones la restricción de alimentos es tal, que la dificultad por parte del paciente para llevar a cabo la dieta se incrementa notablemente teniendo un impacto nutricional en el paciente. Igualmente el acompañamiento emocional es clave.
Primera sesión en Nutrición Bilbao para el tratamiento de la esofagitis
El Centro Nutrición Bilbao está compuesto por un equipo multidisciplinar de especialistas expertos en tratamiento nutricional de las enfermedades inflamatorias del tracto digestivo.
Nuestro objetivo es que cada pauta nutricional sea cuidadosamente establecida y el plan de tratamiento se ajuste a cada paciente.
Por ello en la primera consulta debemos tener claro el diagnóstico ya sea porque el paciente traiga pruebas médicas que avalen el mismo o por prescripción desde el centro. En el caso de la esofagitis las pruebas que confirman la enfermedad suelen ser:
- Una endoscopia: donde se introduce un tubo delgado y flexible por la garganta con una cámaria para observar el esófago. Esta prueba permite recoger una muestra de tejido para su análisis en laboratorio que nos indicará si hay infección o células cancerígenas.
- Una radiografía de la garganta y del esófago donde el paciente toma una solución de bario que recubrirá el interior del esófago y así se puede ver mejor cualquier anomalía del mismo y si existe o no reflujo.
- Manometría esofágica o pH esofágico que mide el número de veces que pasa el ácido del estómago al esófago y el tiempo que permanece allí.
Una vez confirmado el diagnóstico, establecemos una historia clínica completa donde se recogen síntomas, historial médico, estilo de vida y medicación que se esté tomando y después pautamos un plan nutricional totalmente personalizado a cada paciente.
Sesiones de seguimiento para el tratamiento de la esofagitis en el Centro Nutrición Bilbao
Una vez establecida de forma personalizada la dieta para el paciente que sufre esofagitis así como hábitos saludables, tendremos sesiones posteriores de seguimiento donde evaluaremos la correcta evolución nutricional y de la sintomatología del paciente .En base a ello se pautarán nuevos alimentos, medicación, hábitos o una mezcla de ambos.Si padeces de esofagitis y quieres mejorar tu bienestar general, pide cita con nosotros para que valoremos tu caso y podamos ayudarte cuanto antes.